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sábado, 15 de junio de 2013

Mejorando la memoria ram de un Mac Book Pro 2011...Sin pasar por Apple

No, no estoy hibernando, como mi poca actividad en el blog parece sugerir, pero mis proyectos me han tenido ( y me siguen teniendo ) absorbido , con lo que he estado obsequiando a la red con unos meses de silencio.

Pero hoy he decidido romper mi silencio por una poderosa razón: La ampliación de memoria ram de un Mac Book Pro 2011. O lo que es lo mismo,  un pequeño tutorial de cómo substituir los 2 módulos de la memoria ram original ( 4 gigas en total ) por de unos de más capacidad. Y sin pasar por Apple, lo que quiere decir que rebajamos el coste hasta algo menos de un cuarto de los 200 euros que se "embuchaca" la compañía de la manzana mordida por tan sencilla operación.



Antes de entrar en materia, aclararé que esta operación no se puede realizar en los Mac Book fabricados a partir de mediados del 2012 en adelante, pues Apple tomó medidas y a partir de esa fecha empezó a soldar las memorias ram para imposibilitar que los usuarios hiciéramos un Juan Palomo con el asunto.

El mío fue comprado en Septiembre del 2011, así que entraba dentro de los "operables".

El primer paso , lógicamente, es hacerse con unas memorias ram de mayor capacidad cumpliendo con la triple b. Yo al final tiré de manual y me hice con unas Kingston DDR3 de 4 gigas cada una para dejarlo a 8 gigas, y a un precio razonable ( 45 euros ). Lo que decidáis ampliar es cosa vuestra según uso, en mi caso uso máquinas virtuales emulando windows y retoque de imágenes, con lo cual me decidí por los 8 gigas. Si editáis vídeo en HD o algunas operaciones más exigentes, a lo mejor os tenéis que ir a por el máximo, los 16 gigas.

Los precios parece que están subiendo desde que compré yo las memorias hace tan sólo unas semanas, pero hay alguna buena oferta como esta genérica en Amazon a 21,96 euros, o sí queréis unas Kingston ( mucho más fiables ) a unos aceptables 26,56 euros cada una.

Una vez conseguida la materia prima, vamos al lío: A volcar nuestra máquina.


¿Herramientas? Pues la verdad es que con un destornillador de estrella pequeño ( medida #0 ) y unas pinzas de depilación de cejas ya es más que suficiente.



Como ya habréis adivinado, desconectamos primero la conexión de alimentación de nuestro Mac y procedemos a destornillar los ocho tornillos de la base. Ojo, no son todos igual de largos, así que para no liarla, os recomiendo guardarlos en orden. ¿Ya la habéis liado y los habéis desordenado?  Sin problema, fijaos en estas dos imágenes para volverlos a atornillar correctamente luego:



Ya podemos quitar la tapa de la bestia,  operación con la que descubriremos la cantidad de mierda que puede llegar  a acumular en su interior nuestro bonito y querido Mac.


El siguiente paso para evitar males mayores es desconectar la batería. La batería, como habréis adivinado, ese ese cacharrazo que se encuentra a la derecha del disco duro. Ahora ya sabéis porque duran más las baterías de los mac, ¿¿verdad??.
El conector de la batería es el que veis a la derecha de la batería...IMPORTANTE: NO LO DESCONECTÉIS CON LA MANO, por la historia de la electricidad estática, así que usad las pinzas para esto para no tener sustos.

Para no tener problemas con la electricidad estática durante todo el proceso, deberemos descargar la que tengamos en nuestro cuerpo tocando cualquier parte metálica del cuerpo del mac desmontado, así que id tocando sin miedo mientras vayáis quitando y añadiendo las memorias.
Ahora sí que podemos atacar a las memorias ram de origen, que saldrán fácilmente separando las pinzas de plástico que las atenazan por los lados , levantándose ligeramente para que las podamos sacar sin problema. También podemos presionarlas hacia abajo para facilitar que "salten" hacia arriba.



Quitadas las dos memorias originales de sus correspondientes ranuras, ya podemos introducir las nuevas. ¿Cómo? Muy fácil, introduciéndolas inclinadas, a unos 45 grados sobre el plano de la placa base, presionado hacia abajo una vez encajadas en la ranura. Sabremos que encajan bien por el "clic" que hacen las pinzas al atenazarlas correctamente.



Hecha la operación con las dos...Voilá! Ya tenemos las memorias instaladas. Pero ojo, ahora toca arrancar el mac para comprobar que todo funciona sin problemas, así que os recomiendo que pongáis la tapa pero solo con un par de tornillos en los extremos, por si acaso.

Una vez encendido y con Mac OS cargado ( tardará un poco más de lo habitual, aviso ), nos vamos a la esquina superior izquierda de la pantalla, dónde aparece la manzana, y hacemos click en " Acerca de este Mac".
Nos debería de indicar la nueva  memoria instalada:


Felicidades, acabáis de alargar la vida útil de vuestra máquina por un módico precio. Enjoy!

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